El silencio interior.
Usualmente vivo desde el exterior, enfocado en cosas sin real importancia, que solo llenan mis vacíos, los llenan con miedos, los cuales crean patrones, que me terminan haciendo vivir como autómata.
Llevo diciéndome un tiempo… «Cuando me sane interiormente haré lo que me gusta»… Pero hay un problema, y es que me acabo de dar cuenta de que este camino nunca acaba, es un camino de constante evolución, es un constante devenir de situaciones, entonces… Es como si alguien dijese que está esperando la muerte para comenzar a vivir su sueño.
En el silencio interior radica la supresión de los pensamientos o más bien dicho el «dominio interno consciente», donde el mismo estado de silencio interior nos da el regalo de la paz del ser.
Al alternar entre estados de silencio interior y mente egoica pude comparar mi estado a nivel general, y simplemente no tengo dudas de la paz y tranquilidad que ofrece el silencio interior en comparación con el caos que yacía en mi mente egoica.
Dicho estado de paz interior es diferente a solo callarse, es diferente a poner tu mente en blanco o negro, difiere completamente a apagar tu ser a través de lo externo, de llenarlo con «cosas». En dicho estado tu ser se enfoca en sí mismo. Apaga tus 5 sentidos y te encuentras contigo mismo, ese eres tú, aquella conciencia pensante que flota en el vacío. Imagina esa conciencia como objeto pleno de tu ser, sin nada que la rodee, ni pensamientos ni emociones y ahora compárala con una conciencia rodeada de emociones positivas y negativas de recuerdos dolorosos y felices, de vivencias pasadas o futuras, una está en calma abierta a escuchar a recibir y la otra quizás está llena, realmente quizás ya no le quede espacio para aprender, darse cuenta o escuchar de la realidad y es así como la vida tan sabia te quita cosas, te rompe, destruye tu ser egoico… Quizás queden fragmentos pero ahora la vida te ha dado el espacio y la posibilidad de aprender o tomar conciencia.
No desperdicien esa posibilidad de vaciarse y empezar a tomar conciencia, llenando nuevamente con lo que sea que encuentren en su camino, que les dé un placer o satisfacción pasajero, ya que el dolor es la posibilidad de cada uno de sanar las viejas heridas (pueden aplicar esto en prácticamente todo, ya sea algo material, un vicio, pareja, etc.).
Cuando encuentras el vacío, consigues el poder para enfocarte en lo que deseas y el camino del silencio interior, te permite mantener el estado de vacío.
Autor desconocido. Visto en medium.com
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